miércoles, 8 de octubre de 2008

MAMÁ MOSTRO















Marina Goyoleche no es pobre. Tampoco es rica. Se puede decir que Marina es una niña como cualquier otra, con una casa como cualquier otra, y que va a una escuela como cualquier otra. Pero no exactamente.

Y es que a los papás de Marina no les gusta ser uno más del montón.

Por eso, Don Justino Goyoleche siempre le recuerda a Marina que sus antepasados fueron grandes marinos mercantes, a pesar que él es un empleado más en una compañía de seguros,

y doña Esperanza Pachonzón cada día le cuenta a Marina de los grandes bailarines que fueron sus antepasados, aunque ella se la pase en la casa y jugando canasta los jueves.

Y cada día después de clases, Marina tiene que tomar clases de ballet, para algún día estar a la altura de su tatarabuela Svetlana Pachonzón, que inventó el legendario paso “Pas de Riatalin”, que por cierto nunca más fue intentado.

y su papá le enseña actuaría, gestión administrativa y otras cosas complicadas, aunque Marina no entiende ni papa, pues su papá está convencido que ella será una comerciante tan gloriosa como su tatarabuelo Don Gervasio Goyoleche, que era capaz de venderle ropa a los muertos – y se rumora que sigue haciéndolo en el panteón que está enterrado.

Como se han de imaginar, Marina no tiene muchos amigos, porque le queda muy poquito tiempo durante el día, y de los pocos niños que la conocen, la mitad no le hablan pues creen que Marina es una pesada.

Un día especialmente pesado, Marina se fue dormir agotada, esperando dormir tranquila, ya resignada a ser de grande una gimnasta, o una comerciante. O una gimnasta comerciante, si es que una cosa así existe.

Ya Marina estaba soñando profundamente cuando un extraño ruido en su closet la despertó. Primero pensó que algo se habría caído, pero no, ahí estaba de nuevo.

Luego otra vez. Pensando que tal vez un ratón ya había hecho su casa en su cuarto, Marina agarró una chancla y despacito se dispuso a abrir la puerta del closet.

Poco a poquito, ya casi llega, Marina prepara la chancla al tiempo que acerca la mano a la perilla. A la de una, a la de dos, a la de tres…
CONTINUARÁ EN EL LIBRO....... próximamente
historia, color y mostro: Daniel Ortega "Cartoon"
monos: ivanevsky

No hay comentarios: